VENTAJAS
En primer lugar, no cabe duda de que la pizarra digital es muy atractiva para los alumnos porque, no sólo el diseño es más atractivo sino que además pueden participar; pueden salir a la pizarra y simplemente con el dedo pueden cambiar cosas, dibujar o borrar. En segundo lugar, son muchas las posibilidades que ofrece: poder ver un vídeo cuando quieres, escuchar una lectura o hacer un listening sin tener que preparar el reproductor de CDs, buscar la pista, y eso siempre y cuando, cargando con tanta cosa, no te hayas dejado el CD o el reproductor en la sala de profesores. También ayuda a los alumnos con alguna discapacidad porque se puede aumentar el tamaño de la letra y sólo con mover el dedo se pueden realizar muchas acciones en la pizarra, que sirve de ayuda a alumnos con problemas motóricos. Por último, casi todas las editoriales tienen material para ser utilizado en la pizarra digital.
DESVENTAJAS
Primero, hablando desde mi experiencia como docente en bastantes centros públicos, sólo se cuenta con dos o tres pizarras por centro y, muchas veces, una por departamento. Esto quiere decir, que a lo mejor, un profesor de inglés (por poner un ejemplo) puede utilizar la pizarra dos o tres veces a la semana. Además, para utilizarla, el profesor debe trasladar a su clase a un aula diferente con la consiguiente pérdida de tiempo. Segundo, a veces hay problemas técnicos, en ocasiones, utilizar la pizarra digital supone que el profesor deba tener conocimientos no sólo de usuario y por último, en las aulas de secundaria ¿hay realmente aprendizaje? quiero decir, está la atención de mis alumnos centrada en lo que deben aprender (vocabulario, gramática, lo que escuchan o leen) o están prestando atención sólo a las imágenes y embebidos en las posibilidades que ofrece la pizarra a la hora de cambiar el formato. Os dejo un enlace a una página web del Ministerio de Educación en la que explica muy bien el uso de las pizarras digitales en el aula. Pinchad
aquí.